Figma, drafts y dinero
Figma = ¿Gratis?
Hace unos días, Figma modificó la forma en que funcionan los drafts (borradores). En lugar de existir en un único lugar en tu cuenta, ahora Figma decidió que cada borrador pertenece a un espacio de trabajo (workspace). A priori no pareciera tratarse de una solución orientada a pequeños estudios de diseño e individuos, si no un cambio apuntado a generar más ingresos por parte de Figma
Algunos se podrían preguntar: “aparte de tener que mover mis borradores a cada equipo del que soy parte, ¿cuál es el problema?” Sin embargo, al profundizar en los problemas centrales que presenta nos damos cuenta que el cambio tiene poco que ver con la conveniencia y más con evitar métodos que los usuarios encontraron para pagar menos.
Hace unos años, me invitaron a un panel sobre herramientas de diseño. A mí me tocaba a hablar sobre Sketch, mientras que otros dos diseñadores representaban a Adobe XD y Figma. Durante nuestra conversación sobre precios de las apps, el representante de Figma afirmó que Figma era esencialmente una herramienta gratuita. Me dejó helado: desde su creación, Figma siempre ha sido más caro que Sketch ($144 anuales vs $99). Figma se comercializó como una “herramienta gratuita” para hacerla atractiva a nuevos usuarios, y fue sin duda una gran estrategia para diseñadores, pequeños estudios, y demás, pero el modelo mental que se creó es engañoso.
Money
Figma es, al final del día, una herramienta de pago que ofrece algunas características gratuitas limitadas. Generalmente, es más cara que otras herramientas de diseño. Si sus precios son justos o no, no es algo que yo vengo a juzgar; ellos han creado un excelente producto y tienen derecho a establecer sus propios precios. Sin embargo, en el último año, parecen haber estado intentando maximizar sus ingresos a costa de sus clientes, lo que ha llevado a algunas prácticas cuestionables.
Muchos usuarios han incurrido en cargos adicionales sin saberlo al invitar a personas a unirse a su documento. Los administradores han visto aumentos enormes en sus facturas porque los Viewers pueden agregar editores a tus archivos sin el conocimiento y consentimiento del administrador. No existen en la app mensajes claros o alertas. Además, por defecto, un Viewer invitado a un espacio de trabajo no debería tener la capacidad de agregar otros usuarios a tu organización, o convertirlos de Viewers a Editors como si nada. Luego de años de quejas, Figma implementó un pequeño setting a nivel del Workspace, super oculto, para cambiar el default que tanto ha perjudicado a sus usuarios.
Lo que cuesta entender, por ejemplo, es, por qué el default es que cualquier persona pueda hacer upgrade de un Viewer? Por qué el default no es lo que se muestra como Viewer-restricted? Y por qué, un feature tan importante y que puede ahorrarle miles de dólares a una compañía, no es más claro y visible? Cuántos de ustedes desconoce este setting por completo?
Si Figma no ha abordado estos problemas a pesar de las quejas de los usuarios, podría ser porque en el fondo, es parte de su estrategia.
¿Y qué pasa con los drafts?
Antes, los borradores ilimitados permitían a los usuarios agregar editores de forma gratuita. Esto significaba que los usuarios podían invitar a otros a colaborar en sus borradores sin incurrir en cargos significativos por parte de Figma. Las agencias de diseño, que a menudo colaboran con clientes que tienen sus propios equipos de diseño y desarrollo, se beneficiaban particularmente de esta característica. Figma identificó esta laguna y decidió cerrarla. Esta decisión ha resultado en dos problemas importantes:
• Transferir borradores a un equipo ya no permite invitar a colaboradores de forma gratuita, lo que resulta en aumentos significativos de costos para pequeños estudios de diseño.
• Si un diseñador deja una empresa, un administrador puede ver sus borradores, comprometiendo la privacidad del diseñador.
Figma insiste en que estos cambios no están destinados a aumentar las ganancias. Sin embargo, sus acciones durante este último año sugieren lo contrario. Han comenzado a limitar el tier gratuito, eliminado soluciones alternativas para los drafts, comenzado a cobrar por herramientas para desarrolladores que otras aplicaciones, como Sketch, ofrecen de forma gratuita, e impuesto cargos adicionales a los usuarios con una licencia de Figma cada vez que se unen a un nuevo team. Parece que el enfoque está en gran medida en la generación y maximización de ingresos.
Propiedad
Las licencias de software como las conocíamos están dejando de existir. La desafortunada realidad es que “licencia” es un término algo engañoso en el contexto de Figma. Como usuario, no posees realmente una licencia. En cambio, posees “un seat en un worskapce donde puedes o no tener ciertos derechos”. Para unirte a un nuevo workspace o team, tendrás que pagar de nuevo. Si tienes borradores en un espacio de trabajo diferente, esos borradores son propiedad del admin del espacio de trabajo, no tuyo.
Además, el formato de archivo de Figma no es abierto. Se sabe que Figma utilizó el formato de archivo abierto de Sketch no solo para entender y aprender de él, sino también para lanzar rápidamente un importador. Lo que conocemos como “suppa-fast”. Sketch, en contraste, tuvo que hacer ingeniería inversa de los archivos de Figma para que su propio importador funcionara correctamente. Tomó mucho, mucho tiempo.
Entonces, ¿qué hacemos?
En primer lugar, sueño con un futuro donde todas las herramientas de diseño adopten un formato de archivo de diseño abierto. Esto permitiría a los usuarios moverse libremente entre herramientas sin sentirse atrapados.
Sin embargo, la realidad es que no hay mucho que podamos hacer al respecto hoy. Entender la posición de Figma podría ayudarte a tomar una decisión más informada. Podrías elegir seguir con Figma, pero inevitablemente, se volverá más caro, mucho más caro. Los features gratuitos irán desaparciendo, y tendrás que pagar cada día más. Si puedes pasar el costo a tus clientes, entonces no tendrás mayores problemas. Pero debemos saber que Figma y sus prácticas muchas veces van a contramano de los individuos y pequeñas agencias de diseño. También tenemos que tener en claro que Figma no es “gratis”. Si nos olvidamos de ese mindset, mejor.
Si estás considerando otras opciones, no hay muchas, pero hay algunas excelentes. He sido fan de Sketch durante años. Puedes el trabajo de tu vida en Sketch, que tiene un modelo de precios claro y directo. También puedes trabajar offline y tener tus archivos localmente. Nadie te fuerza a colaborar. Son transparentes sobre los costos y se aseguran que los clientes entiendan qué es lo que están pagando. Puedo dar fe de esto ya que una vez trabajé en facturación y billings en Sketch. Siempre valoramos la privacidad de nuestros usuarios y tratamos a pequeñas y grandes empresas por igual. Incluso buscamos facilitar y humanizar un poco las herramientas de colaboración para que los usuarios no se sintieran invadidos en su trabajo.
Si estás interesado en opciones de código abierto, Penpot es una alternativa que avanza rápidamente. Aunque no lo he usado personalmente, se ve robusto y parece preocuparse genuinamente por sus usuarios, al igual que Sketch.
En una era de inteligencia artificial, prácticas cuestionables y grandes corporaciones, elegir la empresa más user-friendly podría ser tu mejor opción.